Restaurante Messina, de Mauricio Giovanini y Pía Ninci

Un paseo por sus platos más destacados

La alta cocina exige producto, equilibrio, técnica, atrevimiento, sorpresa y gusto. Mauricio Giovanini reúne todas estas características exigidas sobradamente. En la variedad de los platos se sintetizan ideas/ejecuciones de muy diversas cocinas del mundo aplicadas adecuada y sensatamente sobre productos también de diversa índole: tubérculos, verduras/huerta, mar y carnes. Componen un todo con sentido y coherencia, completo y atractivo que define muy bien la cocina con marcada personalidad de Mauricio, personalísima, diría yo, ecléctica y de cuidadísima ejecución. En un menú que esta vez me ha parecido más gustoso, sabrosón y valiente…y muy redondo… egregio!

Taco de media luna de VACÍO de Wagyu sudado y atemperado y cocinado/asado a la manera y con la maestria de la Argentina natal de Mauricio, lo que le otorga la capacidad y sabiduría del uso de piezas poco habituales por nuestro occidens mediterráneo. Lo acompañan divinamente SETAS en BEARNESA.

CORDERO en rostbeef, su galante y elegante GELATINA y berenjena de Rte MESSINA Marbella.
Un plato que sorprende por su finura y delicadeza de sabor y de texturas, con unos fideos en gelé de jugo de cordero que conjugan/dan jugosidad a los filetillos tiernos de la carne haciéndolo muy agradable y elegante incluso en frío, sin rastro alguno de «ovinidades» maléficas. La crema de berenjena le aporta gustosidad y tostado leve además de contribuir con su melosidad al buen bocado conjunto.

FALAFEL, YOGUR Y PEPINO.
Un pase de paseo mediterráneo a más no poder, originalmente presentado con el falafel pegado a las paredes del cuenco (estupendo menaje por cierto), donde el comensal juega depositando en el a su libre albedrio las láminas de pepino y el yogur especiado, componiendo un plato muy rico, fresco y equilibrado.

SALMONETE de La Costa del Sol con verduras cocinadas en ensalada «estilo mex». Un ‘clásico» salmonete mediano típico del litoral malagueño, rico, jugoso y con grasilla subcutánea de una piel donde está el genuino sabor de este pescado que aparece al ser tocado por la brasa. en su justo punto. La compañía de esa semi ensalada de huerta es donde se complementa de forma poco habitual y exitosa este pase, revalorizándolo meritoriamente.